Las mayoría de las fotos que les he enviado son para que vean algunos lugares especiales, no solo por su belleza, su arte o su antigüedad, sino también para que puedan ver sus detalles estructurales, con el fin de que los comparen con los detalles de los movimientos del tai chi chuan que practicamos y vean cómo todas las cosas están conectadas y relacionadas.

Por ejemplo, observen la foto del Coliseo. En aquella época, el ser humano era bárbaro y brutal. Los criminales y los opositores eran enviados allí para que combatieran en un duelo a muerte con animales salvajes. Si una persona lograba ganar en uno de esos combates, luego debía luchar contra un gran número de feroces bestias. Nunca nadie pudo salir vivo de esos combates.

Los monumentos históricos que aún quedan nos muestran que el ser humano estuvo siempre luchando, desde la antigüedad hasta el presente. Especialmente en esta era de ciencia y tecnología avanzada, esta lucha se ha vuelto todavía más implacable. ¿Cómo podemos salir de este círculo de lucha interminable? A partir de los detalles pequeños que existen en los movimientos del tai chi chuan que practicamos, el cual tiene como objetivo último fortalecer nuestro cuerpo, cultivar nuestra mente y nuestro espíritu y acrecentar nuestro amor por los demás. Aprovechen las cosas que nos rodean para entrenar la mente, ¡tengan paciencia y practiquen con aplicación!