-Algunos alumnos se olvidan que tienen dos brazos –dijo el Maestro. -Hacen los ejercicios moviendo un solo brazo y el otro queda como muerto. ¿Creen que podrían nadar moviendo un solo brazo? Seguro que no. Es necesario mover ambos miembros para mantener el equilibrio. Además, si mueven únicamente el brazo hábil el otro se va a atrofiar por falta de uso.

-Es indispensable estar concentrados cuando hacemos los ejercicios para obtener un beneficio máximo. Al practicar con total concentración no sólo ejercitamos el cuerpo sino también el cerebro, la mente. Muchas personas llegan a cierta edad y empiezan a tener síntomas del Mal de Alzheimer. Esto ocurre porque no entrenan la mente y el cerebro. Hay que aprovechar cada día de la vida para abrir un poco más la mente. Si uno piensa que ya no va a mejorar o a aprender más, la mente se cierra y empieza la decadencia. Yo quiero que ustedes descubran todo su potencial y lo desarrollen; no quiero que se les oxide por no usarlo. Los mismo ocurre con las articulaciones, si no las usamos se traban y se atrofian. Por eso es muy bueno lo que hace Sara, que a diferencia de otra gente de su edad, se esfuerza por practicar y mover el cuerpo.

-Hay que mantener la propia fuerza hasta el último día. Uno no puede saber cuántos años va a vivir por eso digo de mantener la fuerza hasta el último día; todos los días hacer algo útil, todos los días intentar mejorar.

-Practicamos para fortalecer el cuerpo y para no salir lastimados. Por eso es importante hacer bien los ejercicios, para evitar lesiones. En el taichi chuan aprendemos los movimientos y cuando están bien incorporados, aprendemos cómo se usan en tui shou o en defensa personal. Pero todo eso lo hacemos dentro del ámbito de la Escuela. Por eso, si alguien quiere venir a las prácticas de tui shou me tiene que pedir permiso antes; no es algo que esté abierto a todo el mundo. Porque si viene gente de afuera empieza a haber competencia y cuando lo único que interesa es ganarle al otro surgen las lesiones, la soberbia y el resentimiento. Eso no nos interesa. Hacemos tui shou entre los miembros de la Escuela, cuidando al compañero y tratando de investigar, de incrementar la sensibilidad y de perfeccionar la técnica. Buscamos aprender, no ganar.

-Cuando yo vivía en Taiwán una vez vino a nuestra escuela un muchacho que había practicado otras artes marciales y quiso pelear con nosotros. Hizo tui shou con algunos de nosotros y no le fue muy bien. Entonces, antes de irse, dijo: “Voy a volver dentro de 5 años y les voy a ganar”. Para mí, no tiene buen sentido la práctica que sólo apunta a ganarle a los demás.

-Sobre esta necesidad de competir y de ganarle a los demás mi mamá tenía una frase: «El tonto y el vivo caminan igual por la vida. La diferencia está en que el vivo termina siempre teniendo problemas, en cambio, el tonto vive en paz»

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Resumen de las palabras del Maestro Chao Piao Sheng durante la clase del 15 de diciembre de 2012. Se prohibe la reproducción total o parcial de este texto sin previa autorización del autor.