-Cuando hacemos este movimiento –el Maestro muestra “Tirar hacia atrás”-, hay que bajar flexionando las rodillas y acompañar el movimiento del cuerpo y las manos con la cabeza. Hay que mirar lo que están haciendo las manos. Siempre les digo que hay que moverse como una unidad, en la que cuerpo y mente actúan de manera coordinada. Acompañar el movimiento con la cabeza y la mirada ayuda a este objetivo. De lo contrario, si estamos mirando para otro lado, parece que el cuerpo hace una cosa y la mente hace otra distinta. Ahí no hay unidad, no hay energía y no hay fuerza.

-Este principio sirve para cualquier aspecto de la vida, no sólo para el tai chi chuan. Si tengo que hacer un trámite en el banco es mejor que actúe con total coordinación entre el cuerpo y la mente. Si la mente está en otro lado es probable que salga de mi casa y al llegar al banco descubra que me olvidé un documento y tenga que regresar y todo se complique.

-Por eso es muy importante estar concentrado todo el tiempo. Así, ese estado de concentración constante se convierte en una costumbre y las cosas se resuelven más fácil y rápidamente. A veces la gente, cuando logra resolver rápido algo que parecía complicado, dice que tuvo buena suerte. No existe la buena ni la mala suerte. Todo lo que nos ocurre tiene una causa; no es cuestión de azar.

-Cuando hagan ejercicio, háganlo con total concentración. Yo veo la mirada del alumno y me doy cuenta si su mente está presente o ausente. Imaginen que tienen el pie derecho en un bote y el pie izquierdo en otro bote. ¿Adónde van a llegar así? A ningún lado; hay que tener los dos pies en el mismo bote.

-Hace poco tuve un paciente de unos 90 años que sufría dolores lumbares. Le expliqué cómo tenía que respirar para aliviar la presión intervertebral. Eso me hizo acordar una situación que viví en 1987. Iba viajando en colectivo y fui testigo de cómo un camión quedó trabado al querer ingresar a un túnel subterráneo. La altura del camión excedía los límites del túnel por unos pocos centímetros y al entrar quedó trabado. Yo le dije al conductor del camión que desinfle un poco las ruedas para que el camión baje unos centímetros y quede liberado. El camionero exclamó “qué inteligente que es el japonés” y se puso a sacarle aire a las ruedas.

-Con la columna vertebral pasa lo mismo. Si uno respira profundo puede elevar la postura y separar las vértebras entre sí. Este paciente puso mucha voluntad en aprender a respirar bien y superó ese dolor crónico. Pero otras personas, cuando se les enseña algo nuevo, piensan “no, eso es muy difícil”. Cuando ponemos en la mente la palabra “difícil”, la mente se cierra y ya no es capaz de abrirse a cosas nuevas. Por eso, lo mejor es tener una actitud mental de aceptación. Aceptar todo lo que viene y luego ponerlo a prueba. Si vemos que sirve, lo conservamos. Si descubrimos que no funciona o es perjudicial, lo dejamos ir. Cada uno de ustedes debe preguntarse ¿mi mente está abierta o cerrada?

-La Fundación Tzu Chi está recolectando ayuda para los inundados de La Plata. Si ustedes tienen ropa, colchones, leche, artículos de limpieza, velas, alimentos no perecederos pueden traerlos a la plaza o al consultorio. La Fundación también va a fabricar mantas de abrigo.

-Para la actividad de mañana en el Centro Recreativo Municipal es mejor que los voluntarios lleguen un poco antes de las 9 hs. No hace falta que lleven comida porque allá va a haber. Lo que sí es importante que cada uno lleve su propio vaso. El propósito es no generar basura con los vasos descartables.

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Resumen de las palabras del Maestro Chao Piao Sheng durante la clase del 6 de abril de 2013. Se prohibe la reproducción total o parcial de este texto sin previa autorización del autor.