-¿Alguien escuchó las noticias de esta mañana? – preguntó el Maestro-. Hubo un terremoto de 6 puntos en Japón que provocó una enorme grieta en una ciudad pero sin víctimas fatales. La abertura generada es de 40 metros, casi como si fuera un río. Y todo lo que había ahí se hundió al abrirse la tierra.

-Parece que los desastres naturales en el mundo se dan cada vez más seguido. Por eso es muy importante recitar el mantra, todo el tiempo, con devoción. Pero con rezar no basta. Además hay que practicar para limpiar el cuerpo, la mente y el corazón. Si uno sólo reza pero no hace nada, las cosas se vuelven en contra. Si sólo rezamos pero no practicamos se produce en nosotros una separación entre la mente y el cuerpo. En lugar de estar unidos e integrados, nos dividimos, como la tierra en el terremoto de hoy en Japón.

-A veces se me acerca gente que quiere aprender pakua chang o hsing-i chuan. Yo les digo que primero tienen que aprender taichi chuan, que ahí está la base. Si no pueden comprender en profundidad el taichi chuan cómo van a poder practicar pakua o hsing.i, que son más complicados.

El hsing-i chuan es muy profundo y exige que cuerpo y mente funcionen en total unidad.

-Me pone contento que la gente quiera aprender estas artes, pero hay que conocer más antes de empezar a aprenderlas. Pakua chang está relacionado con los 8 trigramas y hsing-i chuan está relacionado con los 5 elementos. No basta con decir “me gusta, me gusta”, hay que conocer.

-Un alumno que hace poco empezó a practicar taichi chuan me dijo que tenía muchas ganas de empezar con hsing-i chuan, que ese es su gran sueño. Está bien tener sueños, pero ¿qué estamos dispuestos a hacer para alcanzarlos? Si uno no tiene disciplina, paciencia y concentración para practicar en profundidad el taichi chuan ¿cómo va a llegar al hsing-i que es más complicado?

Con soñar solamente no se aprende. Tenemos que aprovechar la afinidad que tenemos entre nosotros en esta vida. No sabemos si en la vida siguiente se repetirá una afinidad como esta. Si desaprovechamos una buena afinidad tal vez nunca volvamos a tener otra igual.

-Yo les digo esto a ustedes para estimularlos. Ustedes ya están en el camino de la práctica; no se quedaron con el sueño y nada más. Vienen a aprender y cultivan esta mutua afinidad que tenemos. Tienen que practicar con disciplina, paciencia y concentración para aprovechar esa afinidad. Si no aprovechan la afinidad, la afinidad se va. No sé qué piensan ustedes.

-Yo siento que esta práctica produce cambios internos muy profundos –dijo María.

-A mí me pasó que ciertas contingencias de la vida que antes me provocaban gran preocupación, ahora puedo aceptarlas con más tranquilidad y eso me permite encontrarles solución. Este cambio se debe a la práctica que realizo acá –dijo Mirta.

-Esta práctica exige mucha paciencia –dijo el Maestro-. No se puede recorrer el camino preguntando a cada rato “cuánto falta, cuánto falta”. Conocí a un muchacho que estaba obsesionado con lograr la Iluminación. Practicó algo de taichi chuan y algo de chi kong pero todo el tiempo estaba preguntando cuándo iba a alcanzar su objetivo. Yo le respondí que no sabía, que cuando llegue a su meta se va a dar cuenta solo.

-Siempre les digo que hay que practicar como “tonto” y lo que quiero decir es que hay que mantener una mente simple. No es bueno tener una ambición desmedida que impida concentrarnos en la práctica presente, en el camino que estamos recorriendo y que sólo nos hace pensar en la meta. Es necesario tener una mente simple y no ser “vivo” que sólo piensa en el resultado final. Si el alumno tiene una mente simple será bienvenido; si es un “vivo”, que no venga.

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Resumen de las palabras del Maestro Chao Piao Sheng durante la clase del 13 de abril de 2013. Se prohibe la reproducción total o parcial de este texto sin previa autorización del autor.