A pocos metros de donde estábamos practicando dos perros amagaron pelearse, pero fueron separados por sus respectivos amos. El Maestro dijo:

-El paseador de perros llevaba varios animales, pero el conflicto se desató con uno solo de ellos que se enfrentó con el perro del otro señor. Los demás perros, a pesar de estar muy cerca, eran ajenos al enfrentamiento. Seguramente, entre los dos perros que peleaban hay un odio intenso que viene de otra vida.

-Una de las lecciones de este episodio es que lo mejor es construir una buena afinidad con todos los seres que nos rodean. Tenemos que tratar de no generar una mala afinidad con nadie. Es importante no permitir que crezca el odio dentro de nosotros.

-¿Qué puede hacer uno cuando ya existe una mala relación con otro? –preguntó Angélica.

-Hay que buscar la oportunidad para acercarse y charlar de algún tema que le interese a la otra persona. Hay que tratar de ver al otro de otra manera y considerar la posibilidad de que uno se haya equivocado y evaluado mal a la otra persona. Un alumno una vez me contó que en el trabajo había una persona con la que siempre tenía conflicto. Yo le dije que todos los días lleve al trabajo un chocolate pequeño y que se lo ofrezca a esta persona. El chocolate es más fácil de aceptar que, por ejemplo, un caramelo. Si uno logra revertir un mal vínculo con otra persona, el nuevo vínculo, más positivo, después se hace más poderoso.

-No podemos ir por la vida esperando que los demás nos den. Si todo el mundo actuara así, nadie daría nada. Es mejor dar. De esta manera vamos a recibir de los demás en la misma medida en que dimos, o más. Entonces, si tengo un mal vínculo con otra persona, no voy a esperar a que el otro tenga un gesto de acercamiento. Voy a dar yo el primer paso para tratar de construir una relación mejor.

-Yo quiero que mis alumnos avancen más rápido porque hay un montón de cosas por hacer en nuestra Escuela y no podremos hacerlas hasta que los alumnos hayan alcanzado un cierto nivel. Cuando el alumno avanza empieza a estar en condiciones de ayudar a la Escuela, de lo contrario, le cuesta mucho hacerlo. El camino para avanzar es prestar atención a los detalles pequeños. Cuando el alumno avanza por este camino, todas las áreas de su vida se enriquecen, su trabajo, su relación con la familia y con todo el mundo. Por eso, quiero estimularlos para que sigan practicando con fuerza, con disciplina, paciencia y concentración.

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Resumen de las palabras del Maestro Chao Piao Sheng durante la clase del 16 de abril de 2016. Se prohíbe la reproducción total o parcial de este texto sin previa autorización del autor.