-Ayer hablé con un alumno de chi kong que vive en EEUU –dijo el Maestro-. Estudia arte y es artista plástico. Me contó que la práctica de chi kong lo ayudó mucho a pintar  y a generar nuevas ideas para sus cuadros. Dice que ya vendió cuatro. Nuestra práctica es muy útil para cualquier tipo de actividad. El desarrollo de la concentración permite al practicante encontrar la esencia de los fenómenos y eso potencia su vida, no importa a qué se dedique. El chi kong ayuda a tener más energía y evita el cansancio. Las dificultades son enfrentadas con soltura. Al llegar más oxígeno al cerebro, las neuronas despiertan y funcionan mejor y la mente es capaz de concentrarse más. Muchas veces el cansancio mental es producto de la dispersión, es decir, de la incapacidad de concentrarse. Una vez toqué una planta que tenía muchas espinas y me pinché mucho. Pero con mi mente le resté importancia al episodio e inmediatamente desapareció la molestia. Si uno aprende a controlar la propia mente puede borrar el cansancio y el dolor. Si además, uno es capaz de disfrutar de lo que está haciendo, se carga de más energía. Eso es tener una mente positiva.

-En mi libro Vibrando en la Naturaleza puse que el petróleo no se va a acabar. Esta semana leí la noticia de una familia en México que hizo un pozo en busca de agua y encontró petróleo a pocos metros de profundidad. En el mundo cada vez se consume más y no se acaba. Nuestra práctica nos permite penetrar en los fenómenos de la Naturaleza y comprenderlos en profundidad. Por eso les aconsejo practicar con ganas y con fe.

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Resumen de las palabras del Maestro Chao Piao Sheng durante la clase del 10 de agosto de 2019. Se prohibe su reproducción sin autorización del autor.