Cambiando el molde

Nov 15th, 2020 | By | Category: Charlas con el Maestro

-Yo siempre hablo de practicar, practicar y practicar –dijo el Maestro-. ¿Por qué insisto en este tema? Les voy a explicar con un ejemplo. En un grupo del curso de acupuntura hay una alumna de unos cincuenta y pico de años, siempre asistía a las clases con una sonrisa, nunca la vi con cara seria, siempre hablaba suave. Debido a este tipo de personalidad, deduje que su grupo sanguíneo era posiblemente B negativo, pero me sorprendió al decirme que era 0 positivo. De acuerdo a mis conocimientos, este grupo es muy fuerte y fácil de enojar, con falta de paciencia, entonces me comentó que ella era así, de joven tenía ese carácter. Y continuó contando su historia. Ella era vecina de una mujer ya mayor, de 94 años, bajita, muy sana, todo el día caminaba contenta, con una sonrisa en el rostro. Tenía mucha afinidad con el resto de las personas, contagiaba su alegría. Entonces un día le preguntó: “Abuela ¿por qué usted está siempre de buen humor, siempre con una sonrisa? Nunca la vi enojada, ¿acaso no tiene preocupaciones?”. La anciana respondió: “Yo puedo elegir, sonreír o preocuparme. Las preocupaciones, tristezas y angustias no me ayudan, hacen que mi ánimo decaiga. Entonces elijo estar contenta, sonreír, me nutre de energía positiva y me ayuda a encontrar soluciones a mis problemas que pueda tener. La decisión en definitiva es sencilla pero produce un gran cambio”. Al escuchar esto, la alumna decidió cambiar, tomó esa actitud positiva. Cada día practicaba y tenía en mente ese objetivo.  Entonces cambió su carácter, su personalidad, a tal punto que hizo cambiar la tendencia de su grupo sanguíneo. Y lo logró con práctica que forjó su paciencia y concentración, le hizo olvidar su antiguo carácter y surgió una nueva inspiración. Su sonrisa y alegría cambió su espíritu, logrando que las personas que la rodean tengan la misma afinidad, contagiando ese espíritu. Es lo que produce la práctica, cambia la vida de cada uno.

Ella trabaja haciendo masajes durante ocho horas al día, yo le pregunté si no estaba cansada, ya que requiere un esfuerzo importante y se gasta bastante energía. Me contestó que no, que su actitud y su sonrisa la ayudaba a no cansarse. La angustia hace que la zona del pecho se cierre y el cuerpo se contrae; por el contrario, al estar sonriente, pleno de alegría, cambia la mente y hace que el tórax se abra, todo el cuerpo se expande, uno se siente más cómodo. Este es un ejemplo de buena práctica, una práctica de buena actitud las 24 horas del día. Nosotros practicamos un rato, una, dos o tres horas y notamos un gran cambio. Se imaginan entonces lo que produciría en nuestra persona la práctica constante e ininterrumpida.

¿Qué debemos aprender de nuestra vida? Debemos aprender cómo vivir mejor, de esta forma simple, sólo manteniendo una sonrisa. Hagan la prueba, mírense en el espejo, notarán cómo el cuerpo se expande. La práctica produce un gran cambio para nuestra vida actual y para la próxima. En el caso de esta alumna con su práctica cambió su vida y seguramente en la próxima tendrá el grupo de sangre B, ya que su molde se formó para que sea así. Es lo mismo que con nuestra práctica, vamos forjando un cambio en nuestra vida para que en la próxima ya tengamos incorporado los atributos que hayamos logrado. Tenemos que dar forma a un nuevo molde para la próxima vida, practicando. Vivir mejor es así, practicar para mejorar nuestras cosas sencillas, no es tener riquezas ni abundancia material, las personas millonarias viven preocupadas, la gente que disfruta de las cosas simples y viven en forma sencilla, no tienen de qué preocuparse, son más libres, no están atadas a nada material, su libertad es interior.

Ahora, vamos a practicar.

——–
Resumen de la charla del Maestro Chao Piao Sheng del 14 de noviembre de 2020. Prohibida su reproducción sin autorización del autor.
Desgrabación: Sergio Arakaki.

Deje su comentario