-Hay que saber cómo hacer los ejercicios -dijo el Maestro-, para así tener el mejor efecto y beneficio. Debemos acompañar los ejercicios con la mente y la respiración por nariz. Estos ejercicios tienen un efecto muy amplio, no sólo sirven para sanar el cuerpo sino que también cultivan nuestro espíritu

Muchas veces cuando nos olvidamos de algo podemos darnos un golpecito en la cabeza para estimular nuestra atención, hay gente que piensa que esto es violento pero ayuda mucho y en mi cultura es algo aceptado, nadie piensa que es con mala intención.

Cuando hay dolor de cintura a veces se da por usar mal la fuerza y hacer un mal movimiento, otras veces porque la zona ya estaba muy contracturada y la exijo de mala manera. En este último caso si me auto-golpeo en la zona vuelvo a recuperar el correcto fluir de la energía que se encontraba estancada.

En los casos de los golpes recientes con hinchazón se puede usar hielo para desinflamar, pero el hielo corta la circulación. A su vez si está inflamado no se puede aplicar calor, lo mejor el paños humedecidos en agua  tibia y dar un masaje para disolver el moretón.

A continuación Angélica leerá un texto que escribí para ustedes:

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形意拳的三種練法

Los tres métodos de entrenamiento del hsing-i

Tradicionalmente, los métodos de entrenamiento del hsing-i chuan son estos:

1. Ming Chin: El movimiento y la rotación del cuerpo deben coincidir con el ascenso y descenso de manos y pies.

2. An Chin: Al practicar, el espíritu debe estar en calma y sin preocupaciones, el movimiento debe ser suave y dinámico, cada movimiento que se realice debe traccionar a todo el cuerpo y debe ser continuo, sin interrupciones.

3. Hua Chin: Durante la práctica, todo el cuerpo y las extremidades deben moverse al mismo tiempo; no se debe hacer fuerza al subir y bajar, o al avanzar y retroceder, sino que debe usarse la fuerza de inercia con la mente.

Mi método de enseñanza es que Ming Chin, An Chin y Hua Chin están incluidos en las técnicas de movimiento básicas y están cubiertos por ellas, y, por lo tanto, no es necesario realizar esta división en tres métodos de entrenamiento. Siempre que practiquen las técnicas básicas con paciencia y concentración, lograrán comprenderlas en profundidad y luego serán capaces de aplicarlas  libremente.

Otro ejemplo similar se da en el tai chi chuan, el cual divide tradicionalmente sus técnicas básicas en ocho: peng, lü, chi, an, tsai, lie, chou y k’ao. Sin embargo, yo nunca hablo sobre estos métodos, porque para mí lo principal es practicar utilizando  el movimiento del cuerpo entero, lo que denomino shen faa. Si logran entender y practicar correctamente los detalles pequeños, si ejecutan cada movimiento hasta su punto máximo, si utilizan todo el cuerpo al moverse y si además logran sensibilidad, entonces no necesitan pensar en las ocho técnicas, pues solamente los limitarían. Por el contrario, si practican bien como les acabo de decir, podrán realmente aplicar lo aprendido en otros ámbitos, y esto es lo que denomino «uno para todo».

Por lo tanto, constantemente pongo el énfasis en el uso de shen faa, lo que significa que todo el cuerpo se debe mover al mismo tiempo. Si practican las técnicas usando shen faa, van a lograr profundizar verdaderamente en ellas, y entonces sin ninguna duda van a alcanzar lo que siempre les remarco: «uno para todo». Cuando se haya practicado utilizando shen faa y se haya profundizado en la técnica, el llamado «uno para todo» no se limitará únicamente a las artes marciales, sino que también se verá en otros ámbitos: el cuerpo será más fuerte, mejorará la vida espiritual, el trato con los demás será, sin uno darse cuenta, más fácil. En general, todo será más fácil de entender y de aprender, lo cual es muy valioso para la vida.

Tanto los tres métodos de hsing-i como las ocho técnicas de tai chi son métodos de entrenamiento de técnicas condensados en los libros antiguos, al igual que ocurre con los métodos de práctica para obtener el elixir de la inmortalidad (lien tan) mencionados por los antiguos. Es por todo esto que yo siempre les recuerdo la importancia de realizar las técnicas moviendo todo el cuerpo, entender los detalles pequeños y hacer los movimientos hasta el final, sin cortarlos (tao wei).

No importa qué tan claras sean las largas explicaciones de los libros, solo con esas explicaciones no pueden llegar a practicar correctamente. No pueden compararse con las indicaciones que puedo darles cara a cara sobre cómo realizar los detalles pequeños y cómo hacer las técnicas moviendo todo el cuerpo a la vez: es ahí donde se encuentra la esencia. Y una vez que logran obtener la esencia, entonces pueden entenderlo todo.

Lo más importante para mí es que todos aprendan de verdad. Una vez que logren entender los principios básicos, comprenderán todo lo demás. Esto es aprender de verdad en la vida.

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-Cuando Buda estaba por morir -retomó el Maestro-, un discípulo le preguntó: “¿Cuando usted se vaya quién será el Maestro?”. Y Buda respondió que sigan sus enseñanzas. De la misma forma el cristianismo tiene los mandamientos para guiar a quienes están en la tierra.

Por esta razón yo también escribo, ya que algún día también partiré. Quiero que mejoren no sólo en artes marciales sino en todas las áreas de su vida, en esta vida y en las siguientes. Por eso hay que aprovechar el tiempo y practicar más para mejorar los genes para todas las vidas.

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Resumen de la charla del Maestro Chao Piao Sheng durante la clase del 2 de marzo de 2024. Prohibida su reproducción sin autorización del autor.
Desgrabación: Federico Winniczuk.