Relajados y cómodos
Dic 6th, 2024 | By Editor | Category: Charlas con el Maestro-¿Cómo notaron la práctica luego de los ejercicios del comienzo? –preguntó el Maestro-. ¿Salió todo bien? ¿Salieron cómodos los movimientos? Muchas veces uno se traba solo. En general esto ocurre cuando nos ponemos duros y rígidos. ¿Por qué hacemos esto? Lo mejor es estar relajados y cómodos, ahí salen todos los movimientos livianos. Hay que liberar las articulaciones.
Cuánta gente sufre en la vida sin entender la razón de su sufrimiento. Creen que todo es difícil, pero si prestamos atención a los detalles pequeños, todo resulta mejor. Al final es uno mismo quien se condiciona diciendo que algo es difícil. Por ejemplo, al caminar, poca gente entiende cómo caminar bien para no caerse o chocarse con otros. Aún en el caminar se pueden detectar los detalles pequeños, por eso, siempre les recuerdo que lo importante es “uno para todo”. Si quieren mejorar en la vida hay que prestar atención a los detalles pequeños en todo. Ahora vamos a leer un texto mio que Andrés tradujo del chino.
—
時時留意周邊事
Prestar atención a todo lo que nos rodea
Tengo un paciente al que trato regularmente. Hace un tiempo leyó mi libro, y empezó a preguntarme acerca de los temas que allí se discuten. Unos cuatro meses atrás, me contó que vive en un lote compartido por tres casas. Los tres vecinos se pusieron de acuerdo para vender todo a una constructora, la cual tasó el valor del terreno en 800.000 dólares. Cuando me lo contó, le dije que todavía no vendiera, que esperara un poco porque seguro iba a aumentar. Al principio le costó entenderlo, pero finalmente me hizo caso. A los dos meses, la tasación del terreno había subido a 1.200.000 dólares. Ahora, dos meses después de esa segunda tasación, el valor aumentó a 1.600.000 dólares, exactamente el doble de la tasación original. Mi paciente se mostró muy sorprendido, y vio que, efectivamente, el valor estaba subiendo. Yo le dije que si no necesitaba con apuro el dinero, esperara todavía un poco más, porque iba a seguir subiendo. Aproveché entonces para preguntarle más detalles acerca del lugar donde vivía, y me contó que los dueños de dos lotes a un lado y tres lotes al otro del suyo, todos quieren vender también. En total sería un conjunto de seis lotes. Yo le dije que, entonces, ahora el valor iba a poder mejorar más todavía. También le pregunté si sabía cuántos pisos pensaba construir la empresa. Me dijo que pensaban construir algo lujoso, pero que no sabía cuántos pisos iban a ser. Luego le pedí que me contara bien cómo era su barrio, para poder ayudarlo más. Me contó que muy cerca, a solo tres cuadras, piensan hacer un shopping, en toda una manzana. Entonces le dije que, con más razón, espere un poco para vender, porque eso seguramente va a hacer que aumente más el valor del terreno. Mi paciente no podía creer que yo supiera tanto sobre ese tema, más siendo extranjero.
Lo que ocurre es que yo siempre le di mucha importancia a los detalles pequeños, a ver el proceso completo de todo, a observar todas las relaciones que existen entre las distintas facetas de un problema o situación. Los detalles pequeños son la base de todo, y eso explica la frase «uno para todo» que siempre les digo. Los detalles ayudan a observar todo el proceso y las relaciones entre las distintas partes que lo componen. La utilización de esta teoría no solo en tai chi chuan, sino en todo lo que se presenta en la vida, resulta extremadamente beneficioso. Esta es la razón por la cual puedo contestar a preguntas y consultas sobre temas muy diversos, dando consejos que resultan efectivos. Si uno quiere ayudar, debe ayudar de verdad. Y si quiere ayudar de verdad, debe practicar de verdad. Y esto se logra con los detalles pequeños, que son tan importantes. Por eso siempre digo que no hay que apurarse en la práctica, no hay que copiar: hay que aprender realmente la esencia de la práctica, a través de los detalles pequeños, para finalmente descubrir la verdadera técnica, la posibilidad de potenciar la mente y de observar todos los casos que nos rodean. No hay que apurarse al aprender, hay que entender cada movimiento, uno a uno. Si no, uno va por la vida siempre apurado, haciendo muchas cosas, pero de modo superficial. Eso no sirve. No es de extrañar que tanta gente viva diciendo constantemente «¿por qué pasa esto?, ¿por qué ocurre lo otro?». Eso es porque no entienden bien. Muchos, cuando me consultan algo sobre cualquier tema, y yo les respondo, se sorprenden y me preguntan cómo es que yo sé sobre eso, si no es mi profesión. ¿Ven la utilidad de los detalles pequeños? Practiquen con paciencia y concentración, aprovechen la oportunidad y la afinidad que tenemos para poder aprender realmente bien. Hay muchos que estuvieron en algún momento cerca de mí, con buena afinidad, pero llegado un momento se alejaron, sin haber aprendido bien la esencia de nuestro arte marcial. Por dar solo un ejemplo, he tenido alumnos de chi kong que querían enseguida tener energía para trabajar mejor, querían sentir rápido su efecto; algunos también querían usarla para sanar a otras personas. La idea de tener todo «ya» no sirve para esta vida. Aprendan de verdad: concéntrense en los detalles pequeños.
—
-¿Qué les pareció el ejemplo? -preguntó el Maestro-.¿Vieron? En solo cuatro meses se duplicó el valor, la empresa misma iba cambiando el valor, ellos sabían bien el valor, mi paciente lo hubiera sabido si hubiese puesto atención a su alrededor, en ver el conjunto de lotes, en lo que se iba a construir y en la construcción del shoping, todos esos pueden ser datos inconexos o para la mente entrenada detalles que nos permiten tomar una mejor decisión. Hay que observar todo, eso es una costumbre que debe practicarse, y en nuestro caso lo hacemos desde el estudio de la forma.
¿Alguien quiere compartir algo?
-Tengo una amiga a la que quiero mucho –dijo Ángeles-. Tiene un problema de angustia que hace años no puede salir de la casa, no contesta el telefono, no reponde los mensajes, y su personalidad se volvió muy agresiva. Por ejemplo para el cumpleaños le toqué el timbre para saludarla y no me abrió la puerta. Ella no sabe cuál es bien su problema, pero para mí al final tiene que ver con que tiene mucho dinero y quizás eso la hizo perezosa.
Hace unos días me comentó que se iba a internar en una clínica en Entre Ríos. Me puse muy contenta y fui a ayudarla a limpiar la casa. Casualmente yo había ido a la Fundación Tzu Chi y vi que estaban sahumando, me gustó mucho el olor y pensé en mi amiga para llevarle el sahumo.
Cuando fui, me abrió la puerta y me empezó a tratar mal, levantaba la voz, quizás por falta de costumbre en recibir gente, pero luego se fue tranquilizando. Estuve limpiando durante tres horas y gradualmente se fue dando una charla amorosa, retomando viejas conversaciones que teníamos, en un momento se me cruzó preguntarle si me dejaba sahumar la casa. Me dijo que sí, yo le empecé a pasar y a recitar el mantra NAN MO A MI TUO FOO durante cuarenta minutos. Le pasé por toda la casa, yo no podía ni quería parar de recitar el mantra. Ella estuvo muy agradecida y yo le agradecí por abrirme la puerta. Fue muy movilizador para mí. A los dias el sobrino la llevó a la clínica. En definitiva, es un ejemplo de que la plata no hace a la felicidad.
-Tuve muchos pacientes adinerados –dijo el Maestro-. Pero no saben hacer nada, son muy depresivos, por eso es muy bueno lo que hizo Ángeles. Es muy bueno recitar el mantra, pensando en otras personas para ayudar, quizás la energía que les llegue no sea máxima, eso depende de cuán abierta esté la otra persona. Pero recuerden que eso vuelve para uno también, es decir, recitar el mantra para ayudar a otras personas también nos ayuda a nosotros.
Este es un momento muy especial en el mundo, hay muy mala onda, por eso en estos momentos conviene mucho recitar el mantra. No hay que pensar en los buenos resultados, quizáas no vengan ahora, pero van a llegar.
—
Resumen de la charla del Maestro Chao Piao Sheng durante la clase del 30 de noviembre de 2024. Prohibida su reproducción sin autorización del autor.
Desgrabación: Eugenio Fontana