Practicar con paciencia todos los días

May 9th, 2025 | By | Category: Charlas con el Maestro

-Siempre hable de cultivar la paciencia y la concentración en la práctica -dijo el Maestro-. Una señora me llamó para hacer el curso de acupuntura y me preguntó si en tres meses ella podría ofrecer acupuntura. Esto es peligroso y muchas veces esta impaciencia nace en la codicia. Hay que aprender con paciencia todos los días sin estar pensando en las retribuciones.

Otras personas aprenden solamente con libros y después los resultados no son los deseados. He tenido pacientes que tuve que tratar porque no podían respirar por haber aplicado mal acupuntura. Por eso hay que entender completo, con paciencia y concentración y práctica. De esta manera generamos buenas costumbres.

Recuerdo que en la presidencia de Menem muchos tenían negocios y hacían mucho dinero, y me decían que debía tener un negocio. Yo siempre seguí mi camino, haciendo lo que sé, porque para mí el dinero es sólo para vivir. Esa es la razón por la que me preocupo no sólo por enseñar correctamente sino también que ustedes aprendan bien. Ahora leeremos el texto que escribí para hoy.

事,物,理

Asuntos, objetos y teorías

Hoy vamos a hablar de tres cosas que están muy relacionadas entre sí: las actividades o asuntos que se nos van presentando día a día, los materiales u objetos que nos rodean, y la teoría. Estos tres conceptos deben funcionar juntos para que las cosas salgan bien. Todos los días nos vemos enfrentados a ellos, pero mucha gente no sabe bien cómo funcionan, y por eso hacen las cosas mal. He observado que muchos no prestan atención a lo que hacen, y luego se quejan de las cosas que suceden.

En cuanto a los asuntos, podemos decir que los hay grandes y pequeños. Normalmente, la gente no le presta mucha atención a los pequeños asuntos, con los cuales convivimos día a día. Hace todo sin pensar, sin tener en cuenta la relación que tienen con otros asuntos u objetos. Para saber cómo enfrentar un asunto, o cómo usar un objeto, está la teoría. Pero si falta la teoría, o es deficiente, entonces tampoco se pueden hacer las cosas bien.

Nosotros, que practicamos, no podemos actuar como esa gente. Debemos prestar atención a todo lo que nos rodea. Siempre les digo que vinimos al mundo para aprender y practicar. Todos tenemos una misión que cumplir. Pero muchos no saben cuál es, no tienen la menor idea. Solo piensan que deben disfrutar, nada más. Pero, si se tienen en cuenta los asuntos, los objetos y la teoría, uno ve que, al relacionarse, tienen mucho que ver con la afinidad. Porque, finalmente, ¿cómo se genera la afinidad? Si no hay asuntos que atender o resolver, no hay contacto entre las personas y, por lo tanto, tampoco hay afinidad. Además, para llevar a cabo algunos asuntos, hay que relacionarse con los objetos. Y es necesario conocer cómo hacerlo, es decir, la teoría subyacente.

Para entender esto de la afinidad en relación con estos tres conceptos, solo deben pensar en cuánta gente conocieron por haber hecho un trámite, o realizar tal o cual actividad. Muchas pasaron, pero otras quedaron, como amigos o conocidos. O miren nuestro caso: yo vine desde tan lejos, gracias al mandato que me dio mi maestro. Sin este asunto que depositó en mí para llevar a cabo, nunca hubiera venido a la Argentina, y entonces jamás nos hubiésemos conocido. Es decir, no hubiéramos tenido afinidad. Si no hay asuntos que resolver, no se genera la afinidad. No existe la casualidad.

La teoría es muy importante, en cualquier ámbito. Por ejemplo, cuando les enseño las técnicas, siempre les digo que presten atención a su mente, su cuerpo y su vista. Todos deben moverse en conjunto, y ahí están los detalles pequeños de los que siempre les hablo. Si no prestan atención a los detalles pequeños, no pueden percibir cómo está el cuerpo, si está cómodo o no, si está realizando bien o mal el movimiento, etc. Deben practicar así, concentrados, porque, de lo contrario, pueden lastimarse o sentirse mal, y a veces eso hace que abandonen la práctica, lo cual los lleva a perder mucho tiempo. Recuerden: con una sola práctica, pueden cosechar muchos beneficios. Por un lado, ahorran tiempo y generan buena afinidad. Además, al utilizar el cuerpo, ayudan a la memoria. La sensación del cuerpo es muy importante. Y si entienden mejor la teoría, la fe en la propia práctica crece más y más. Esto hace que cambie el estado de ánimo, y que mejore el aspecto espiritual. Por otro lado, dan más ganas de aprender otras cosas. En la vida, hay mucho por aprender. Es por esto que, una vez al año, trato de organizar esas salidas para que puedan aprender más cosas, a las que normalmente no podemos dedicar tanto tiempo en la práctica habitual de los sábados. Esto lo hago porque es mi deseo ayudar a todos los alumnos. Quizá algunos no lleguen a darse cuenta de este deseo que tengo de ayudarlos, pero los que fuimos a Moreno, esta vez aprovechamos mucho la salida, todos quedaron muy contentos y aprendieron muchas cosas más.

Hay que aprovechar la práctica día tras día, sintiendo cada vez más ganas de aprender. Las excusas hay que dejarlas de lado. Es necesario adaptarse a cualquier lugar o momento para poder practicar. No importa si llueve, o si el lugar es muy pequeño, o si hay mucho ruido: siempre se puede adaptar la práctica para cada situación. Quisiera que todos practicaran así, con muchas ganas y sin pensar si los movimientos son difíciles o no: lo mejor es hacer, practicar, probar uno mismo.

Espero que con esta explicación puedan entender más su práctica. Cada día, cada año, hay menos tiempo, así que deben aprovechar ahora.


Resumen de las palabras del Maestro Chao Piao Sheng durante la clase del 3 de mayo de 2025.
Prohibida su reproducción sin autorización del autor.
Desgrabación: Federico Winniczuk

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