Entender el detalle pequeño
Jul 1st, 2025 | By Editor | Category: Charlas con el Maestro-¿Para qué practicamos? -preguntó el Maestro-. Practicamos para que no se oxide nuestro cerebro, cuanto más estimulamos nuestro cerebro, mejor funciona. Nuestro cerebro funciona muy poco, normalmente no expandimos su capacidad, por eso tenemos que hacer distintos ejercicios para estimularlo y que tenga mayor plasticidad.
En acupuntura hay un punto para estimular la actividad cerebral. Cuando a uno le falta movimiento, también se utiliza este punto. El cerebro es el que estimula el movimiento por sus redes nerviosas, por eso es importante mantenerse siempre activo. Siempre debemos practicar, concentrados en el detalle pequeño.
Ahora escuchemos la lectura de hoy:
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要練得超越本能
Practicar para lograr la reacción natural
El sábado 31 de mayo estuvimos practicando todos juntos la aplicación de un movimiento de la forma. Después de tres intentos, poco a poco empezaron a entender cómo se usaba esa técnica. De todas maneras, algunos necesitaron más intentos hasta lograr ejecutarla con relativa fluidez. Solo después de repetidos ensayos, comenzaron a comprender un poco cómo utilizar el eje central del cuerpo para guiar el movimiento, y así, gradualmente, empezaron a explorar los secretos de esta técnica. Una vez que llegó a comprender el uso del movimiento, Sofía me pidió practicar conmigo. Al notar el efecto de la técnica, quiso probar otros movimientos. Cuanto más practicaba, más interesante le resultaba, y, de a poco, comenzó a ejecutar técnicas de combate libre. Al principio lanzaba un movimiento a la vez, pero luego empezó a encadenarlos, uno tras otro. Llegado a ese punto, yo ya no observaba sus movimientos con la vista, sino que reaccionaba naturalmente a sus técnicas. Como no miraba sus movimientos con los ojos, ni siquiera sé cómo fue que Sofía terminó cayendo al piso.
Esto es precisamente lo que suelo decirles: cuando uno domina los detalles pequeños, las respuestas se vuelven naturales. Ya no se necesita la vista, ni pensar mentalmente en cómo responder a los ataques. Después de esta práctica espontánea con Sofía, ni yo mismo sé cómo le respondí a cada técnica. Esto se debe a que las técnicas surgen espontáneamente, de manera prácticamente instintiva. También demuestra que este método de práctica es correcto y útil. Quiero compartir esto especialmente con todos ustedes, para que tengan más confianza y se esfuercen más en su práctica. No lo digo para presumir de lo que soy capaz de hacer. Si se tratara de presumir, habría hecho publicidad de esto hace 40 años. ¿Por qué esperaría hasta esta edad para hacerlo? Siempre he sido exigente conmigo mismo, y considero que lo importante es mantener una actitud humilde para aprender y practicar con paciencia. Les cuento hoy este caso, simplemente, para animar a todos a que practiquen con dedicación.
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-La práctica que hicimos ese día, demuestra cómo se usa nuestras técnicas y cómo nuestro cuerpo se mueve en forma automática reaccionando en forma natural –dijo el Maestro-. Aprendiendo los detalles pequeños surge la sensación para que se reaccione en forma natural. Es entender nuestro cuerpo, concentrados en la sensación. Si hacemos mal un movimiento, tenemos que saber cómo se siente nuestro cuerpo, la incomodidad, para que uno mismo pueda realizar la corrección. Esta unidad que logramos es el uno para todo. Unidad en la atención al detalle pequeño, la sensación de nuestro cuerpo y la concentración para lograr todo.
¿Cómo se hace para entender el detalle pequeño?, ¿Cómo nos damos cuenta cuál es, y qué observar?
-Sensación, concentración, observación -contestaron los alumnos.
-Hay algo más importante: realizar los movimientos en forma lenta, despacio, para poder sentir. Al hacerlo lento, se percibe cómo actúa cada una de las partes de nuestro cuerpo, el músculo, el tendón, la articulación, muñeca, codo, hombro, cadera, rodilla y el tobillo. Cómo pasa la energía, cómo se siente el movimiento. Si se traba en algún lado o si es natural y fluida. Si se entiende esto, sale todo.
-Esto es como la Naturaleza –dijo Darío-, que cambia muy despacio. Es la lentitud que construye el detalle pequeño; de la misma manera, si practicamos lento, estamos conectados en cuerpo y mente con la Naturaleza, por lo tanto, las acciones salen solas, en forma natural.
-El cambio de la Naturaleza es tan lento que no se ve –dijo el Maestro-. La gente no se dà cuenta de los cambios, nuestra técnica es igual, hacemos los movimientos tan naturales, de tal manera que al principio la gente no los ve, pero cuando se dan cuenta, ya es tarde. Tenemos que prestar atención cómo funciona la Naturaleza, para poder actuar de la misma manera, aprender de ella para aplicarlo en nuestro cuerpo y en nuestra práctica. Siempre les comento, que a pesar de que mi Maestro no está más para enseñarme, todo lo que aprendí después fue de la Naturaleza, que es mi Maestra.
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Resumen de las palabras del Maestro Chao Piao Sheng durante la clase del 21 de junio de 2025.
Prohibida su reproducción sin autorización del autor.
Desgrabación: Sergio Arakaki